Prostitución 2.0

Imaginad que sois el puto amo del ligue. Imaginad que no hay chica que pueda resistirse a vuestros encantos físicos, sois una sexmachine en potencia y todas las chicas que conocéis querrían pasar una noche con vosotros. Ahora imaginad que vais a Estocolmo con los colegas y que casualmente conocisteis una chica sueca en uno de vuestros viajes anteriores que os pagó papá (sí, sí, vuestro padre tiene pasta infinita, de hecho os compró una casa en Castelldefels, un Smart y un Crossfire recientemente), la chica en sí es despampanante, rubia, guapísima, buena chica, amable y simpática, un encanto. Imaginad que vive a 500km de Estocolmo y que se traga 5 horas de bus para venir a pasar unos días con vosotros y se ofrece a hacer de guía, aunque vosotros y ella sabéis cuál es el motivo principal de que ella venga: el sexo, ella quiere acostarse con vosotros, porque sois los putos amos, ¿recordáis?

Ahora imaginad que no sólo la utilizáis para ese fin, sino que además y pese a que se trata de una buena persona os reís de ella en su cara con los colegas, pues no sabe nada de español... además empezad a bostezar cuando intenta iniciar una conversación, empezad a hacer ruiditos para que se calle, mandadle hacer lo que a vosotros os interesa como si se tratara de un perrito faldero (ahora me llevas de compras, ahora me acompañas al hotel y hacemos lo que hemos venido a hacer, etc), es decir convertidla en vuestra puta: Le pagáis la habitación, folláis con ella (explicando los detalles a los colegas, claro, eso es parte del juego para vosotros, no?) y luego hacéis lo que os salga del puto nabo y encima tratándola de forma pésima y degradante.

Pues esta situación, tal cual he descrito se dió en Estocolmo, el ligón era un conocido mío y la chica una tal Loise de una población cerca de Göteborg.

Una vergüenza. Me parece intolerable el comportamiento del tío, pero lo que más me sorprendió es que ella aguantaba estoicamente todo eso y él lo sabía y me parece realmente patético.